sábado, 1 de junio de 2013

La Chacra Mixta ¿qué es?

La profundización del debate sobre el modelo de desarrollo agrario -basado en el monocultivo de soja, a través de pooles y mega productores (cualquiera sea su forma jurídica), que desplazó a la chacra mixta como unidad ejecutora central de la actividad agropecuaria de la pampa húmeda- nos obliga a precisar  el concepto acerca de qué es y cómo funciona la chacra mixta. A veces, por ingenuidad o desconocimiento y otras por puro interés de confundir las cosas, es habitual que la chacra mixta sea asociada a la idea de una granja, o se la vea simplemente, como el lugar de residencia del chacarero;  antes que intentar conocer y analizar cómo funciona, se la tilda gratuitamente de “inviable” –tanto desde el aspecto económico, como desde el humano- en términos de retorno  y/o permanencia de una forma de agricultura, que determinados intereses económicos quieren jubilar o presentar como perimida, al tiempo que hacen ver como el camino del monocultivo sojero, con concentración de tierras y rentas, es tan inexorable como inevitable. Pues nada de esto es cierto. Nuestra chacra tradicional sigue siendo imbatible a la hora de evaluar las performances de los distintos tipos de unidad productiva, para ejercitar la actividad agrícola ganadera. Desde todo punto de vista -agronómico, económico, cultural, social- es, sin dudas, la más eficiente y apta para garantizar producción, empleo y abastecimiento con seguridad y soberanía alimentaria. Pero vamos a empezar por definir y mensurar lo que entendemos por chacra mixta, tratando de clarificar para evitar, que los barulleros de la eficiencia, que actúan por cuenta y orden de la concentración económica que practican las burguesías intermediarias y grandes corporaciones, no desacrediten a este extraordinario instrumento al servicio de la nación; que, además -por si lo anterior no fuera lo suficientemente relevante- genera arraigo, ocupa territorialmente el país, da y crea trabajo, y es parte esencial de nuestro del acervo cultural .

Definición de Chacra Mixta

Es aquella explotación agropecuaria  que ronda una unidad económica, en más o en menos, que no puede calificarse como estancia, manejada por sus propios dueños con residencia efectiva en el predio o no, que combina en proporciones disimiles , agricultura con ganadería , en cualquiera de sus variantes tanto agrícolas como ganaderas .


Chacra y chacareros

Una cosa es plantar soja y otra ser chacarero. Héctor Huergo, el principal difusor del monocultivo de soja, con concentración de tierras y rentas, no sin astucia, llama chacarero a todo aquel que planta soja, sin importar, ni discriminar, tamaño, ni  diversificación, sólo tiende a apropiarse de un término simpático, que le otorgue legitimidad social y política, al monocultivo y la concentración. Pero no existe chacarero sin chacra, y viceversa. Son una unidad inseparable e imposible de analizar dicotómicamente; es por eso que en la definición hemos puesto toda la atención en reflejar y conservar el concepto histórico, que nace con nuestra colonización agraria y se extiende hasta nuestro días y que refleja no sólo una forma de vincularse con la tierra -desde lo filosófico, económico y social- sino también, por el tamaño; que en materia de posesión de tierras no es menor,… es  central. La extensión  de la propiedad va por delante, define y categoriza al poseedor de tierra: pequeño, mediano o terrateniente, son extractos económicos, sociales y culturales distintos y en extremos absolutamente antagónicos. Una cosa es la chacra y el chacarero, y otra la estancia y el estanciero, o el fideicomiso y el empresario rural o financiero, que ejerce la producción agrícola, pero no tiene tierras, ni arraigo. Chacarero es el que tiene chacra, que hoy es una, de las formas de ejercer la actividad agrícola, la más virtuosa según nuestro concepto, además de la más amenazada y en peligro de extinción;… pero no la única.


Confusión

La chacra mixta no es rotar cultivos. A veces se confunde, lo que es una decisión agronómica o económica, de sembrar siempre lo mismo por necesidad u obligación, pero  nada tiene que ver con el concepto de “chacra mixta “. Porque en ésta, el esquema de rotación -tanto de cultivos como agrícola- ganadero- es  una práctica ancestral que está implícita genéticamente, como marca de calidad y razón de ser del manejo chacarero, que impide el agotamiento del suelo, por el uso exclusivo de un solo cultivo y agrega fertilidad por la presencia animal en el esquema. Esto no impide la incorporación de fertilizantes cuando se  lo precise o bien si el chacarero así lo decide, no son labores excluyentes, sino están supeditados a la decisión empresarial y se pueden, y deben, complementarse de acuerdo a lo que marquen los requerimientos de la tierra y el bolsillo. También se tiende a invalidar a la chacra mixta por la residencia efectiva o no, del propietario en el lugar, cuestión  absolutamente accesoria; pues se puede o no residir en el predio o tener un empleado; pero lo central es que exista la mixtura agrícola ganadera y  allí se incorpore valor a lo que se hace. Otros la confunden con tener una granja, o lo que se denomina el “patio” de la chacra. No es lo mismo. Son cosas distintas. No cambia la ecuación unas gallinas o un par de chanchos -que por lo general, cuando está la presencia humana y constante del chacarero y su familia, siempre está la quinta y la granja-, si en el resto de la explotación predomina el monocultivo. En la diversificación razonable y planificada reside la fortaleza económica de la chacra mixta; de producir, para vender todo el año y distintas cosas. Tener un “portafolio diversificado de productos”, así como los financistas tienen distintos tipos de colocaciones para minimizar el riesgo, los chacareros tienen también, distintos productos para promediar  y reducir los sobresaltos tanto climáticos, como de precios.


No confundir PYMES, con chacra mixta.

 Las Pymes son por definición una categoría estrictamente económica, los parámetros para encuadrarla están fijados por la facturación y cantidad de empleados, según el rubro. En cambio la chacra mixta es un concepto más amplio, ya que tiene que ver con la relación de los individuos, la sociedad y la naturaleza, en un sentido amplio y totalizador. Una chacra mixta puede dar nacimiento a una Pyme, o una Pyme puede construir una chacra mixta, pero son conceptos filosóficos y económicos distintos. La chacra mixta es por lo general madre de otros emprendimientos que se generan a partir del crecimiento  y de la acumulación de capital, que permiten absorber  parte del crecimiento demográfico familiar; todo depende el tamaño tanto de la explotación, como de la familia (cuando la chacra es demasiado pequeña, sólo contiene a una porción de la familiar). Pero siempre genera trabajo, cobijo y alimento, tanto directo o indirecto así como arraigo. Cuando una chacra cae, se cierra una unidad de desarrollo territorial, insustituible y no hay pool, ni mega productor, ni política social que la reemplace.


No significa volver al caballo y al carro

Vincular a la chacra mixta con el atraso, con volver para atrás, es cosa de todos los días para los voceros glorificadores del monocultivo de soja. Sin conocer, sin analizar, ni poner todos los ingredientes necesarios para hacer un adecuado diagnóstico, sólo ven lo que quieren y les conviene. Desde  la chacra mixta partieron todos los adelantos tecnológicos de la agricultura moderna, es allí donde se crearon y nacieron, en un laboratorio se  probaron, se corrigieron y –finalmente- se usaron… ¡Sí, se usaron! Y no es un detalle menor, ni poco significativo. Es un rasgo excepcional  de nuestros chacareros, que demuestra el alto grado de absorción al cambio y a la  innovación tecnológica que tienen, tanto en genética como en manejo productivo, y –sin dudas- en la manipulación de las técnicas más sofisticadas. Los chacareros son expertos fierreros por naturaleza, son ellos los que crean, experimentan y modifican -todo el tiempo- los diseños de las máquinas agrícolas, que después las empresas masifican y venden. Quisiera saber cuánto invierten las fábricas metalmecánicas del sector en investigación científica. Son los chacareros los que, sin cobrar royalty, mejoran constantemente los productos que luego, ellos fabrican y comercializan. La investigación y prueba de los implementos se hace sobre las tierras de los chacareros, y son el “ojo clínico” que da el fallo. Los empresarios son muy duchos en aumentar precios o comprar campos, pero a la hora de invertir en tecnología e investigación, no son precisamente un ejemplo.

Nada mejor que la chacra para hacer agricultura científica. Es el ámbito ideal por tamaño y dedicación personal para desarrollar la agricultura por ambiente. ¿O me van a decir que un mega productor o un pool de siembra va a prestar atención personalizada  al suelo -que es ajeno, lo exprimen a más no poder-, como lo hace habitualmente un chacarero, que conoce cada rincón de su propiedad y que además, le traslada el cariño y cuidado que sólo prodigan los que aman lo que hacen y valoran lo que tienen (ya  que por lo general, es el sacrificio de varias generaciones)? Más en este momento tecnológico de siembra directa y gran desarrollo científico técnico, es un tiempo  ideal para que el pequeño y mediano productor acceda -en condiciones de igualdad- a todos los adelantos; porque hoy, son los contratistas los verdaderos cultivadores y sembradores de toda la agricultura del país. Este esquema de prestadores de servicios (tanto agrícolas, como ganaderos), donde sin importar el tamaño del lote, se puede acceder a un trabajo realizado por máquinas de última generación, hace posible lo que -en la década de los ’80- parecía imposible y era una desventaja competitiva a la hora de dar vuelta la tierra; porque había que tener máquinas propias, y no siempre el más pequeño podía comprarse fierros de última generación para hacer las labores en tiempo y forma. Hoy, los servicios de siembra, cosechas y demás, están disponible para todos por igual, merced a una red de prestadores de servicios de gran calidad,  que hace que cualquier chacarero pueda sembrar un lote de 10 hectáreas -de forraje o cereal- con la última tecnología, al igual que un estanciero de 1000 o que un pool de 100.000 hectáreas. No hay diferencia por tamaño en el acceso  a la tecnología. Y además, gracias a los servicios de extensión del Estado (INTA), cooperativas o privados -en materia de asesoramiento técnico- que trabajan permanentemente con el productor para mejorar y eficientizar todos los procesos, tanto agrícolas como ganaderos, la diferencia desde lo productivo es, nítidamente, a favor de la chacra mixta. Es de sentido común que, a igualdad de acceso a tecnología, asesoramiento y  a insumos, lo que marca la diferencia es el “ojo” del amo, la cercanía y cuidado de estar todo el tiempo al “pie” del cultivo y de los animales, hace lo intensivo mucho más eficiente y redunda en mayores volúmenes productivos, con mejores resultados de los que puedan lograrse cuidando el campo desde una oficina en la Recoleta. El pastoreo rotativo, será más intenso y soportará más carga animal por hectárea; la siembra y cosecha será más eficaz y los rinde mayores; el engorde con terminación a corral será más efectivo, con el chacarero cuidando y participando del proceso que controlándolo desde una empresa, a través de empleados sin compromiso con el medio y gerentes que sólo ven números macros. Así que eso de que la Chacra mixta es volver al caballo y al carro, no es más que un relato de quienes quieren seguir impulsando la concentración y el monocultivo de soja, a costa de poner al país y a su pueblo en una situación de indefección  frente a los grandes conglomerados monopólicos, que son los que avanzan donde la chacra mixta retrocede. Es muy importante ver qué intereses se defienden para identificar qué tipo de agricultura se pretende, o es con productores o sin ellos, porque sin duda el atraso lo representa el monocultivo y el latifundio, de eso no hay ni duda, ni hace falta ninguna comprobación científica o práctica, basta ver nuestra historia y lo que pasó al mundo, para darse cuenta que latifundio y monocultivo son sinónimos de atraso. Lo dijimos y lo repetimos, hasta el hartazgo o el cansancio: cuando una chacra mixta cae, un chacarero deja la práctica activa de las labores rurales, se cierra una unidad de desarrollo territorial insustituible, que ni pools, ni mega productores, ni política social alguna, podrán reemplazar eficazmente.



Pedro Peretti
Salud y cosechas