Patriotas

   Hay un importante sector de la sociedad argentina, al que poco le importa el carácter

autónomo e independiente, de cualquier  potencia extranjera que asuman sus dirigentes para conducir el país. No valoran negativamente que sus líderes políticos, ejemplo Macri haya consultado con dos embajadas foráneas (EEUU e Israel)  antes y para, designar al Fino Palacio como jefe de la Policía Metropolitana, según el mismo reconoció públicamente; o que la boca grande o bocona, como más le guste al lector, Laura Alonso sea financiada por una fundación de los Fondos Buitres. Nada de eso parece ser un desvalor. No rinden cuenta por eso,

Dos íconos de la derecha vernácula.
Ambos antes de tomar decisiones,
 consultan a potencias extranjeras.
Y lo nacional....bien gracias.

nadie se las pide, ni parece ser un lastre electoral que deba cargar la derecha. Es más, lo exhiben como una cucarda de su gestión. A Massa, los WikiLeaks también lo dejan pegado a la “embajada”, como buchón; eso en Nordelta, tendrá una valoración…, en el pueblo de a pie, sin dudas, otra, y no precisamente de aprobación.

   Algo similar pasa con el nuevo héroe, post morten, de la derecha local, el fiscal Nisman, “nada como la muerte para mejorar a las personas”, decía el célebre Jorge L Borges, gran e imperecedera verdad. Santiago O`Donnell, el periodista argentino que dio a conocer los  WikiLeaks, cuenta: “Los cables reflejan una y otra vez la falta de independencia del fiscal respecto de la embajada de Estados Unidos en la investigación del atentado, tal como documenté en mis libros Argenleaks (2011) y Politileaks (2014).
Dicha conducta incluye el adelantarle a la embajada medidas judiciales tanto de la fiscalía, como del juzgado que entiende en la causa AMIA, llevar borradores de resoluciones a la embajada para ser corregidos hasta conseguir la aprobación de la sede diplomática, y disculparse reiteradamente cuando no se dio preaviso de alguna medida judicial del caso a los diplomáticos y agentes de dicha embajada estadounidense” [Fuente: Detrás de Nisman, por Santiago O`Donnell, Noticias de América Latina y el Caribe (Nodal)]. Pero nada de esto parece asombrar o  preocupar a nuestras clase acomodas, que se sumaron alegremente a una marcha convocada por  fiscales de dudosa reputación, sin que aún y en plena investigación, la justicia se haya expido. Ricardo Sáenz, el superior de Viviana Fein, fue el que argumentó en favor de la constitucionalidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final; otros dos están sindicados por los familiares de víctimas de la AMIA, por ser parte activa de la trama de encubrimiento; otro dicen que es el “cajoneador” oficial de causas contra grupos concentrados de medios y fugadores de divisas; otro protector de barras bravas boquenses. ¡Una pinturita! Con semejantes antecedentes laborales, llama la atención que una parte importante de la sociedad acuda a su llamado, la única explicación racional, es el inocultable tufillo político y golpista que tenía la misma, que era la principal consigna convocante, a pesar de que no se expresara. Ése y no otro, era el verdadero motivo de tamaña movilización. Sin golpismo encubierto, no se entiende por qué se pedían así mismos hacer bien su trabajo. Un verdadero atentado al sentido común. La convocatoria al 18F, la forma en que lo hicieron y quienes lo hicieron, fue un acto de absoluta mala fe democrática, destinado a desgastar y reemplazar anticipadamente, a un gobierno legítimamente constituido, electo por una amplísima mayoría de ciudadanos y que debe seguir gobernando en la plenitud de sus facultades, hasta el último segundo del último día.. Para darse cuenta de esto y oponerse, no es necesario ser K, alcanza con ser demócrata, patriota y tener un mínimo de sentido común e informarse correctamente. De no ser por el certero fallo del juez Rafecas, sin duda, los movimientos desestabilizadores  iban a ir in crecendo. Habrá otros, pero de otro tenor y tipo.

  AHORA YO ME PREGUNTO: ¿qué hacia allí en Partido Socialista? Porque… que esté la derecha, lo entiendo y es hasta lógico, ¡pero los Socialistas! ¡Qué decepción! Más extraviados que nunca, sin rumbo propio, sin ideas, ni políticas construidas desde sus  específicos y particulares punto de vista. Comprando a paquete cerrado, la visión de la derecha vernácula, totalmente alejado de las cuestiones nacionales. Cada vez menos socialista y autónomos, y más dependiente ideológicamente de la construcción mediática de los grupos monopólicos. Mucha fundación Libertad y poco, J. B. Justo, Manuel Ugarte o Karl  Mark.

  A principios del 2014, después de las corridas de Enero, donde hubo un claro y nítido intento golpista encabezado por el “patriota” de Aranguren; el dólar estaba 7 $ y él junto al célebre banco HBSC, salió a comprar dólar billete a 8,50$, ¡casi nada ¿no?!... de puro patriota que es... pero son desconfiados, si los golpes blandos o suaves no existen… da risas, y bronca. Nos toman por idiotas. Y no hace falta ser K, para repudiar y alertar sobre esto, sólo hace falta ser demócrata y patriota, y que los hay de todos los colores políticos. Bueno… una buena parte de la prensa concentrada y de organizaciones agrarias, que lo llevan a dar charlas, lo elevaron a ícono del empresariado nacional. A él, justo a él, que es presidente y  representante en la argentina de los intereses británicos en el país, ¿representante del empresariado nacional?, ¿que tendrá de nacional el CEO de la Shell?... Increíble. Lo adulaban,  y trataban de “corajudo”. Daba risa tanta baba del cipayismo mediático… el único calificativo que les cabe con todas las letras es el de: cipayos, verdaderos y  auténticos cipayos.

  Nunca la derecha tuvo pruritos nacionales, más bien fue una picazón incómoda esta de tener que esconder que la terminal de ellos siempre está “afuera”, subordinada a los países imperiales, en las empresas, en los lobby, pero siempre afuera de la política y del país…para ellos la Rosada sólo es el asiento simbólico del gobierno, las decisiones se toman fuera, la política no conduce, se subordina,  mandan los negocios. En cambio para los sectores progresistas la autonomía de sus dirigentes y el lugar donde se toman las decisiones es innegociable, y buena aparte de su acerbo político, esta asentado allí. Esa es una de las claves de una gestión progresista, agrandar al máximo los márgenes de autonomía del país, no depender, no consultar con poderes extraños a la Nación. Para el Movimiento Nacional y Popular, cualquiera sea su vertiente de origen, siempre define la cuestión nacional, lo de adentro, es parte constitutiva esencial del pensamiento y la acción, es iniciático e identitario de la configuración de su accionar político. También fue tema de largos y farragosos debates históricos, la cuestión de la autonomía dentro de la propia izquierda, por qué no pocos grupos políticos, ataban sus decisiones a centros de poder del extranjero y eran criticados por derecha y por izquierda. Discusión que hoy parece saldada, en la izquierda, más no en la derecha, que es más dependiente y foránea que nunca. Lo llamativo ahora es, que frente a los Nisman, Aranguren, Macri o Alonso, nadie diga nada de su dependencia foránea a la hora de tomar decisiones. Sin duda es la famosa mano invisible del mercado que disciplina y protege a todos sus adoradores y cultores, marcándole el camino de la dependencia externa a la hora de diseñar políticas locales. Pobre país, pobre pueblo, si estos auténticos cipayos,  y su concepción dependiente de lo “nacional” -para usar un término jauretchano, puro y duro-, ganan la próxima contienda electoral.

Salud y Cosechas

Pedro Peretti